Mejorar los espacios de trabajo debe ser una de las principales labores de toda empresa ya que dedicamos muchas horas de nuestras vidas trabajando en la oficina y la mayoría del tiempo de forma sedentaria, con lo que disponer de buenas herramientas y de un buen ambiente acogedor es importante para hacernos sentir bien. Por ello, el diseño de interior en una oficina es importante para poder lograrlo.
Según el estudio realizado por Staples Vocation frustration, revela que el 82% de los trabajadores considera que un espacio de trabajo que funcione bien y sea atractivo, genera más interés y en consecuencia, mayor productividad.
Tenemos claro que la gran mayoría de los trabajadores dedica más tiempo a estar en la oficina que en casa, aunque en la actualidad, el home office está siendo una alternativa muy aplicada por ciertos sectores. Tanto en un entorno como en otro, cuidar el espacio de trabajo es importante no sólo porque hace que la experiencia laboral sea más satisfactoria, sino también porque transmite un mensaje muy positivo a los empleados: “Nos preocupamos por ti”.
¿CÓMO PUEDE AYUDAR EL INTERIORISMO A MEJORAR LOS ESPACIOS DE TRABAJO?
Para conseguir un espacio de oficina adecuado, ya sea con el equipo, el diseño de la oficina o los materiales adecuados, puede contribuir en gran medida a reducir las molestias cotidianas en el trabajo.
Es importante, que a la hora de diseñar una oficina se tengan en cuenta aspectos de interiorismo tan importantes como la confortabilidad, la luz o la privacidad, ya que de ello dependerá el rendimiento y la productividad que la empresa tenga a posterior.
¿QUÉ ASPECTOS DEBEMOS TENER EN CUENTA A LA HORA DE DISEÑAR UNA OFICINA?
Para mejorar los espacios de trabajo y el diseño de interior de unas oficinas, debemos tener en cuenta aspectos tan importantes como los metros cuadrados disponibles, la iluminación o el presupuesto, ya que tener claros dichos elementos será fundamental a la hora de conseguir la comodidad, la organización y el buen ambiente que un espacio de trabajo digno se merece.
Algunos de los aspectos que debemos tener en cuenta son:
El tratamiento del color
Aunque en ocasiones pueda parecer algo banal, la elección de un color determinado es muy importante en una oficina ya que está comprobado que unas tonalidades u otras pueden influir en nuestro en nuestro estado de ánimo.
Colores demasiado cálidos como el naranja y el rojo o fuertes como el negro no son muy aconsejables para crear un ambiente de trabajo donde se requiere calma y concentración. En cambio, colores fríos como el blanco, el beige o azul cielo pueden conseguir un ambiente positivo y sin estrés.
El evitar la aplicación de colores cálidos en las paredes no significa que no podamos introducir elementos decorativos que nos aporten esa extra dosis de ánimo para poder trabajar.
Puede que resulte buena idea introducir elementos llamativos de colores vivos como ficheros o algunos estantes en colores como el amarillo o el verde manzana así como el rojo. La aplicación de estas pinceladas de color en los espacios de trabajo, pueden aportar diversión al espacio además de ganas de hacer cosas cada mañana.
El uso de la tecnología
La resolución de la tecnología es un punto clave para mejorar los espacios de trabajo en el diseño de una oficina porque nos permite entrar de lleno en el trabajo colaborativo así como establecer conexiones con otras empresas y colaboradores que no necesariamente se encuentren en el lugar de trabajo.
La tecnología además, es una herramienta muy útil para encontrar el punto exacto de funcionalidad y confort que un espacio de trabajo necesita, así como para lograr una buena proyección al exterior de la imagen y del nombre de la empresa.
El factor iluminación
Disponer de luz natural tanto en una oficina como en un espacio de trabajo como un home office, es fundamental para un buen rendimiento laboral, puesto que la luz natural influye de forma directa en aspectos como nuestro estado de ánimo y en nuestras ganas de permanecer activos.
Es importante ubicar los puestos de trabajo lo más cerca y donde esté el mayor número de ventanas o zonas acristaladas para que a los trabajadores además de mejorar su optimismo, se ha demostrado que aminora los efectos del estrés.
Por el contrario, si no es posible tener luz solar cerca del puesto de trabajo, es aconsejable disponer de puntos de luz artificial preferiblemente que tengan un tono amarillento y cálido, con la finalidad de que la luz artificial se asemeje lo máximo posible a la luz natural.
Atenuar el ruido
El ruido es un aspecto fundamental a la hora de mejorar los espacios de trabajo y diseñar una oficina para evitar interrupciones y fomentar la concentración.
Un espacio ruidoso o con mucha reverberación no facilita el poder desempeñar de manera productiva nuestras tareas. Elementos como los paneles fonoabsorbentes o el uso de moquetas en el suelo ayuda a mejorar y reducir las vibraciones.
Ergonomía en el puesto de trabajo
La ergonomía es clave para desarrollar de manera óptima nuestro trabajo además de evitar bajas laborales como dolores de espalda, tendinitis etc. Elegir una buena silla de oficina ergonómica como regular bien la altura de la silla para que nuestras piernas formen un ángulo de 90º así como tener los pies descansados en el suelo, harán que nuestro cuerpo se mantenga en reposo y tengamos una buena circulación sanguínea.
Si por nuestra estatura, nuestras piernas no llegan al suelo, es aconsejable utilizar un reposapiés. Además, utilizar un buen apoyabrazos de la silla de oficina permitirá que nuestra muñeca esté en posición de descanso mientras se trabaja, evitando sobrecargas y lesiones como la temida tendinitis.
Por último, es aconsejable que la pantalla con la que trabajemos este enfrentada a nuestra vista evitando así la inclinación de la cabeza evitando dolor en las cervicales. Estos son algunos aspectos críticos para desarrollar una jornada laboral saludable.
Bienestar en el ambiente
El bienestar es fundamental para fomentar la creatividad y la productividad con lo que espacios para el ocio, la desconexión y el relax también se deberían tener en cuenta a la hora de diseñar una oficina. Estos espacios podrían ser salas de lectura, o espacios de café para evitar el sedentarismo.
Espacios donde aumenten los niveles de concentración así como promover reuniones espontáneas para poner en común nuevas ideas o propuestas.
Fuente: Ofival