Romance, ligue o crush son algunos de los nombres que se le dan a las relaciones entre personas y no podía ser la excepción dentro del ámbito laboral. Pasamos más tiempo en la oficina, que el que pasamos con nuestra propia familia o pareja. Por ello no es de extrañar que al relacionarnos tanto con nuestros compañeros de trabajo, surja atracción. ¿Pero, es esto beneficioso o contraproducente?

En México La Ley Federal del trabajo no establece como causa de despido mantener una relación afectiva entre empleados, siempre que se cumplan los lineamientos organizacionales y las metas de productividad establecidas por cada empresa.

Los romances de oficina pueden ser un tema espinoso dependiendo del tipo de relación que se de y pueden tener su lado bueno al hacer que los enamorados sean más productivos. 

Hay quienes opinan que son una consecuencia inevitable del contacto humano constante. En lo que la mayoría de los expertos están de acuerdo es en que son muy frecuentes.

“Distintos estudios demuestran que cuestiones como el amor, el romance y la sexualidad se plantean tarde o temprano, en el trabajo”. Los expertos señalan que las parejas comprometidas en un romance formal pueden ser en realidad más productivas.

Pero, para que este tipo de relaciones funcionen y sean beneficiosas, los psicólogos recomiendan guardar la discreción para evitar complicaciones asimismo evitar los tratos preferenciales o concesiones especiales que afecten la productividad laboral así como evitar comentar las desavenencias amorosas con otro compañero.

No siempre conviene tener amoríos con alguien que trabaja a la par de uno, pero en el caso que esto suceda no es conveniente dar rienda suelta a los sentimientos si no reinan la confianza y el respeto ya que la situación podría irse de las manos sobre todo en el aspecto laboral cuando estos interfieren directamente con las funciones y el rendimiento de alguno de los colaboradores y cuando no se respetan los límites y espacios entre ellos.

Por otra parte, se realizó un estudio en donde se preguntó acerca de “comportamientos ambiguos en el trabajo que pudieran tener un objeto sexual” así como también se realizaron pruebas de personalidad y de satisfacción en el trabajo. Los resultados de esta investigación comprueban que los hombres flirtean más por aburrimiento e insatisfacción en el desarrollo de sus actividades, en tanto que las mujeres lo hacen porque les gusta la otra persona y que ambos pueden hacerlo para obtener ciertas concesiones o beneficios.

Hoy por hoy más del 25 por ciento de las compañías han establecido políticas específicas acerca de cualquier tipo de relaciones entre los empleados. Existen grandes diferencias entre lo que está permitido y lo que es inteligente. Se asegura que 80 por ciento de los profesionales en recursos humanos (RH) y 60 de los empleados creen que las relaciones entre jefes y subalternos deberían estar prohibidas. De hecho quienes salen con sus superiores son considerados personal «de poca confianza» 

En algunas empresas las normas son, no mantener relaciones entre jefes y subordinados y en caso de darse la situación exigen a las dos partes que pongan en conocimiento de la dirección de la empresa su relación. En pocas palabras, si el amor es mutuo, firme un documento. Algunas empresas llegan a hacer que la pareja redacte un contrato en el que certifiquen que su relación es de mutuo acuerdo.

Cosas que debes preguntarte antes de cruzar la línea.

  • Descubre qué tipo de relación será: La oficina resultaba muy divertida. Pero, poco después, hay quien está preparado para una relación seria, y otro que solo quiere huir. Lo que les pasó es común en los infructuosos romances de oficina: no siempre se busca lo mismo.
  • Prepárate para romper: Sin importar cuán prometedora pueda ser esa relación que acabas de comenzar, las estadísticas señalan que 60 por ciento de las nuevas parejas terminan durante el primer año. Lo mejor es hablar del tema en la primera etapa del romance, cuando ninguno de los dos sabe qué pasará con su relación, si intentas hacerlo cuando ya hay sentimientos de por medio, será demasiado tarde.
  • No te engañes, todos saben: La encuestas señalan que 37 por ciento de las personas envueltas en uno de estos romances buscan mantenerlos en secreto. Pero, ¿lo consiguen? No importa qué tan discreto quieras ser, tus compañeros identifican otras señales de romance, como el lenguaje corporal, así que es inevitable. 

Lo importante es saber y entender las consecuencias buenas y malas que podemos enfrentar tras vincularnos románticamente en la oficina. Y lo primero y más importante que debemos destacar es que para que las cosas funcionen entre personas y en el tema de relaciones, nada como la honestidad, saber qué terreno pisamos y hacia dónde vamos.